Usted no está tan sano como piensa.
En la época de sus padres, ellos básicamente llevaban vidas naturales y realizaban trabajo activo. El alimento era natural, el agua era natural y el aire era fresco durante los cruciales años formativos hasta la edad de 15 años.
Ahora la comida es artificial y está contaminada con pesticidas y químicos. El agua se recicla muchas veces. Usted se sienta todo el día en la oficina frente a una computadora.
Cada tanto se le inyectan drogas modernas altamente poderosos. Estas drogas tienen efectos que los científicos no descubrirán hasta 20 años después de que usted las haya tomado. Ellas destruyen su sistema inmunológico y, paso a paso, destruyen su sistema nervioso. Usted va al hospital y lo "componen". A menos que usted contraiga uno de los aún más poderosos virus durante su estadía en el hospital. El problema es que la resistencia de los virus se duplica cada 10 años.
Todo esto significa que si bien sus padres vivieron sanos hasta la edad de 70 o 90, con usted no sucederá lo mismo.
El hombre común, quizás usted, no se da cuenta de que el estrés es la razón número uno para desarrollar enfermedades en la edad adulta. Combinado con sus antecedentes durante sus años formativos hasta los 15 años, el haber sido impactado por la contaminación moderna significa que usted no está para nada tan sano como piensa.
Y como en la mayoría de las cosas en el mundo moderno, la verdad se esconde tras la publicidad, tras la cara artificial que no le dice que la persona con la que usted está tiene problemas, por las píldoras que toma para remediar los síntomas, lo que significa que usted no sabe qué es lo que realmente anda mal. Por el hilo dental que daña sus encías.
Los deportistas están sujetos a ejecicio vigoroso y usted puede pensar que esto es sano. No lo es. Unos pocos años después se retiran. En sus años de vejez, en los tiempos de sus padres, ellos bien podrían haber vivido hasta la edad avanzada a pesar de sus heridas. Usted no es saludable, por lo tanto, si realiza este tipo de ejercicios, está dañando su salud aún más.
Aun si no lee o compra este libo, el autor le urge a hacer dos cosas: aleje a su hijo de la vida moderna tanto como pueda y elimine el estrés de su vida. El desprecia las modas occidentales y le agrada aquello que significa llevar una vida natural. Explica qué implica realmente, pero establece que solamente es importante cuando (no "si") se enferma, no antes.
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